Historias de Clientes
Delia Parrales Ruiz
Éxito Sin Fronteras
Delia Parrales Ruiz. Su modelo de negocio y el respaldo de MiCrédito, se combinaron para que nuestra clienta de éxito de León saque adelante a su familia.
El sueño de obtener mejores ingresos para sacar adelante a su familia, llevó a Delia Parrales Brenes, de 35 años de edad, a renunciar a un trabajo fijo que tenía en una empresa de zona franca en León. Eso fue hace aproximadamente ocho años.
Doña Delia, una señora muy risueña quien vive en Calle Real de Tolapa, León, nos cuenta cómo fue que decidió dar un giro de 180 grados. Según relata, cuando trabajaba en la zona franca vio que el salario era “insuficiente” y tenía cuatro hijos que formar para que tuvieran un mejor futuro. Así que decidió hacer un préstamo para establecer un negocio que le brindara mejores ingresos económicos.
Uno de los negocios que más le llamó la atención para desarrollar, fue vender piezas de artesanía hechas de barro y valoró que las mejores para poner a funcionar su negocio eran las elaboradas en San Juan de Oriente, en Masaya.
“Mi esposo Rolando Vargas y yo decidimos viajar a Costa Rica para venderlas allá”, cuenta doña Delia, quien afirma que anda de ambulante con las piezas ofreciéndolas a los turistas que llegan a la playa Manuel Antonio. “Con él he venido desarrollando mi negocio”, asegura y añade que cada tres meses viene a Nicaragua por dos razones: visitar a sus hijos y llevar mercadería.
En ese caso, su esposo es quien se queda en Costa Rica garantizando una cabina donde viven en Quepos, mientras ella viene a darle seguimiento a los estudios de sus hijos y hacer las compras en San Juan de Oriente. “Nos ha resultado, y mucho”, confiesa.
Sobre cómo llegó a MiCrédito, doña Delia refiere que un oficial de crédito la visitó y valoró su modelo de negocio y sus planes de inversión, obteniendo “una buena respuesta por parte de la sucursal en León. Llevo tres préstamos ya”, apunta.
Esto ha hecho que su negocio crezca bastante “porque gracias a Dios ha venido evolucionando”, asegura. Esto le ha permitido mejorar la calidad de vida de su familia, “voy a construir tres cuartos, del mismo negocio sale el pago de la universidad de mi hija Katherine, que estudia Enfermería; mi hijo Jordan que va a estudiar a San Isidro, Matagalpa, en fin estamos sacando a nuestra familia adelante”, comentó.
Finalmente, doña Delia dijo sentirse muy agradecida “porque sinceramente me siento apoyada, me han dado los préstamos rápidos y me gusta cómo me tratan en la institución.”